Rompiendo paradigmas…..
Quiero empezar definiendo paradigma como el conjunto de costumbres que tenemos interiorizadas y que realizamos cada día de manera casi imperceptibles, sin pararnos a evaluar su importancia, esfuerzo o retorno. Un ejemplo muy sencillo; yo solía desayunar a primera hora de la mañana en un bar que había justo debajo de mi casa y cuando cambiamos de domicilio quede desubicado, salía de mi nueva casa y ya no había bar, ya no sabía donde tomar mi desayuno, me sentía desubicado, por lo que me vía obligado a buscar soluciones:
- Coger mi coche y desplazarme a mi bar de siempre (cosa que hice varios días hasta que entendí que no tenía sentido)
- Buscar un nuevo bar cerca de mi nuevo domicilio donde desayunar cada mañana (probé con varios y ninguno era como mi bar, ni como mi café, ni tenían la prensa para echar un vistazo a primera hora, etc.)
- Cambiar y desayunar antes de salir de casa, con mi café, mis tostadas y mi prensa, y aunque reconozco que al principio tuve mis resistencias, acabe por acostumbrarme y desde entonces llevo ya nueve años sin la necesidad de salir a desayunar fuera.
Todo en la vida cambia, nada es eterno, el estatus que hoy disfrutamos mañana puede ser no reconocido, la estabilidad o inestabilidad que hoy tenemos mañana puede cambiar, la vida nos balancea entre dinámicos escenarios, y los cambios nos hacen dudar, nos desorientan, nos duelen, incluso nos hacer enfrentarnos a miedos no reconocidos hasta el momento.
Pero lo único que no cambia, es el cambio, el cambio es estable, no deja de producirse, de nada valen nuestras resistencias, nuestros reproches, nuestras quejas, nuestros lamentos, de nada vale, por lo que unicamente nos queda adaptarnos a las nuevas situaciones y hacerlo lo antes posible, cambiemos y trabajemos para volver a disfrutar de las nuevas experiencias. Os recomiendo el libro ¿Quién se ha llevado mi Queso? De Spencer Johnson (una fábula ilustrante sobre la historia de dos ratones y dos hombres que vivían en un laberinto).
El cambio puede llegar de manera imprevista o puede ser la consecuencia de la toma de decisiones personales que nos llevan a ello. Yo he tomado la decisión de romper con aquellos paradigmas que me suponían una carga, paradigmas que formaban parte de mi y que afectaban a la vida de las personas de mi entorno, por eso ahora estoy viviendo la experiencia de buscar y encontrar nuevas circunstancias que me ofrece la vida cada día, múltiples, hasta este momento desapercibidas, pero llenas de posibilidades hasta este momento desconocidas.
Yo he tomado la decisión voluntaria de buscar cambios en mi vida, sabiendo que en cualquier momento los cambios llegarán de manera imprevista, pero de una manera u otra, estamos obligados a buscar las circunstancias que nos permitan ser felices y hacer felices a las personas con las que compartimos nuestra vida. Busquemos y si es necesario compartamos nuestra búsqueda porque en nuestro entorno encontraremos las respuestas.
Jesús Ferrer
VIVIR con mayúsculas 